jueves, 20 de marzo de 2008
La araña y el hombre
Una araña del porte de un poroto saltó de un libro y mordió la mano del hombre que lo sostenía. Luego corrió a refugiarse en los pliegues del lomo.A los pocos días el hombre murió de una insuficiencia renal y fue enterrado con gran pompa, porque era un hombre de poder. Expresamente solicitó que se escribiera en su lápida: “El gran enemigo es fuerte y el pequeño es venenoso. El primero nunca pudo hacerme daño. Por el segundo estoy aquí”.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario